Ya está en vigor la directiva RED, 2014/53/UE aplicable a todos los equipos que transmiten o reciben señal radioeléctrica.
Hasta el 13 de junio de 2017 han convivido las directivas R&TTE y RED. Desde esta fecha es de aplicación exclusivamente la directiva 2014/53/UE relativa a la armonización de las legislaciones de los Estados Miembros sobre la comercialización de equipos radioeléctricos (RED). Transpuesta a la legislación española por el Real Decreto 188/2016.
Según la misma, todos los juguetes radiocontrol, drones, walkie-talkies, etc., que utilicen ondas de radio de cualquier tipo, wifi, bluetooth, etc., deben ser conformes con dicha directiva, ya que son considerados equipos radioeléctricos.
Entendiendo por «equipo radioeléctrico»: el producto eléctrico o electrónico que emite o recibe intencionadamente ondas radioeléctricas a fines de radiocomunicación o radiodeterminación, o el producto eléctrico o electrónico que debe ser completado con un accesorio, como una antena, para emitir o recibir intencionadamente ondas radioeléctricas a fines de radiocomunicación o radiodeterminación.
Esta directiva exige acompañar cada equipo (juguete) con la Declaración de Conformidad correspondiente, en castellano. Si no se incluye la declaración de conformidad completa se debe indicar lo que se llama declaración de conformidad simplificada, que debe aparecer en las instrucciones o envase.
También destacar que desaparece el símbolo de aplicación de la directiva con restricciones:
y aparece una nueva forma de indicarlas, si las hay (no obligatorio por el momento), empleando el pictograma seguido de los países con restricción, ejemplo:
Por supuesto, para el marcado CE en los juguetes, además de esta directiva son de aplicación la Directiva de seguridad de los juguetes 2009/48/CE, 2012/19/UE RAEE y 2011/65/UE RoHS, o cualquier otra dependiendo de las características específicas del juguete.
La aplicación de la directiva RED excluye la aplicación de la directiva de 2014/30/UE sobre compatibilidad electromagnética (EMC).
Más info:
Bartolomé González