La iniciativa “Power2Flow” se pone en marcha con objeto de desarrollar e integrar los componentes que formarán baterías recargables de zinc-aire. Estas baterías se basan en sistemas de flujo redox, que permiten almacenar energía eléctrica en forma de compuestos químicos, que se oxidan y/o reducen al circular por el interior de la celda electroquímica. Además de ser sistemas robustos, duraderos y versátiles, representan una buena alternativa para almacenar excedentes de energía, como los que proceden de fuentes de energía renovables.
Por otra parte, el hecho de utilizar materiales muy abundantes en la naturaleza y de bajo coste, como son el zinc y el oxígeno, permitirá desarrollar baterías más económicas con respecto a las actuales tecnologías del mercado, como es el caso de las baterías de ión-litio.
El proyecto, en el que colaboran AIJU e ITE Instituto Tecnológico de la Energía, se compone de varias fases, entre ellas, el diseño y fabricación de cada uno de los componentes de la celda electroquímica (electrodos, membranas y electrolitos), su respectiva validación, y el diseño y construcción de una monocelda zinc-aire.
En la actualidad, las baterías primarias de zinc-aire están ampliamente extendidas y comercializadas. Sin embargo, las baterías secundarias o recargables presentan una serie de barreras, como su corta vida útil o la degradación de los electrodos, que impiden su penetración en el mercado. Por eso, el reto de este proyecto es solventar esas limitaciones que permitan aumentar su rendimiento y durabilidad, y de esta forma impulsar su combinación con fuentes energéticas limpias y renovables.
Más info: Elena Marchante – energia@aiju.es