La producción y distribución de productos falsificados ha sido un tema recurrente abordado por las autoridades, las empresas y las organizaciones de consumidores desde hace años. Según la OCDE se ha incrementado la comercialización de productos falsificados un 154% desde 2005, y ello en gran medida debido al auge del comercio electrónico.
Las falsificaciones suponen un perjuicio, tanto económico para las empresas, como para la salud de los consumidores. En el caso de los productos infantiles las falsificaciones suponen además un grave peligro para la salud de los consumidores más vulnerables. Según el estudio de la EUIPO “Qualitative Study on Risks Posed by Counterfeits to Consumers. 2019”, el 80% de los productos inseguros y falsificados eran productos para niños.
De ahí surge precisamente el proyecto europeo CounterRisk “New skills to face the risks of counterfeiting in consumer goods”, liderado por AIJU, en el que se desarrollarán herramientas formativas innovadoras sobre la protección de los derechos de propiedad intelectual en la empresa, la seguridad del producto infantil y cómo las nuevas tecnologías, como por ejemplo, el blockchain, pueden ayudar a luchar contra las falsificaciones.
El proyecto está dirigido principalmente a profesionales de las empresas de productos infantiles, especialmente pymes, y a personal técnico de las organizaciones de consumidores, como colectivo clave que alcanza a las personas que compran productos de consumo para niños, tanto en el canal online, como en tiendas físicas.
El objeto del proyecto CounterRisk es ayudar a mejorar las competencias de los profesionales en este ámbito y concienciar de los perjuicios, tanto económicos como para la salud, que suponen las falsificaciones para la sociedad.
Actualmente el proyecto se encuentra en fase de firma del convenio de subvención con el Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (SEPIE), estando prevista la reunión inicial con todos los socios en marzo de 2021.
El proyecto CounterRisk, llevado a cabo por un consorcio europeo liderado por AIJU (España), cuenta con la Universidad de Estrasburgo (Francia), Lucentia Lab (España), la Asociación para la Promoción de la Seguridad Infantil (Portugal) y la Asociación Checa del Juguete (República Checa).
Además, el proyecto cuenta también con el apoyo de la Maastricht European Private Law Institute (M-EPLI); The European Consumer Voice In Standardisation (ANEC), Parque Científico de Alicante, International Trademark Association (INTA), European Association for Injury Prevention and Safety Promotion (EUROSAFE) y el Cluster de Empresas Innovadoras del Valle del Juguete-CEIV.
Más info: Mª Cruz Arenas