El pasado mes de junio se llevó a cabo el evento final del proyecto BioMat4Future, el cual tiene como objetivo conseguir formulaciones totalmente sostenibles, es decir, utilizando tanto matrices poliméricas como aditivos de origen bio. En la jornada se mostraron los resultados del proyecto, donde se han obtenido diferentes aditivos de origen natural para su uso en biopolímeros. Las funcionalidades estudiadas de estos aditivos han sido la coloración, retardancia a la llama y efecto antimicrobiano.
Concretamente, la obtención de estos aditivos se ha realizado a partir de residuos agrícolas. Para la obtención de colorantes se han utilizados restos de varias hortalizas, como acelgas, espinacas, brócoli y zanahorias, entre otras. Como agente retardante a la llama se ha empleado lignina, fracción obtenida de partes leñosas de la mayor parte de las plantas, como son las cáscaras de algunos frutos o las mismas ramas. Por último, el efecto antimicrobiano se ha aportado mediante la adición de aceites esenciales procedentes de las pieles de cítricos, como la naranja y la mandarina. También se han utilizado extractos de la piel de la granada.
Tras la obtención de estos aditivos, se han incorporado a la matriz de diversos biopolímeros, tales como PBS y PLA, obteniendo piezas por inyección que sirven como ejemplo de aplicación en la industria del juguete.
Más info: María Jordá – proyectos@aiju.es